--==>Yhke y las estrellas <==--
“El infinito y generoso Universo regala cada noche sus estrellas al hombre, para que este con sabiduría elija una, que ilumine su camino, fortalezca su espíritu y haga crecer su corazón” ….. Yogi.
La estrella de Add brillada intensa esa noche, fue fácil para Yhke, guiado por su luz llegar al encuentro, a pesar de la gran distancia, el recorrido a través de bosques tupidos y suaves llanuras, se le hizo corto y entretenido.
La suave pero intensa luz de Add, se filtraba entre las hojas del robusto y joven árbol, que en su copa a varios metros del suelo escondía el refugio de Virn, muy bien provisto y protegido, muy lejos del hombre y muy cerca del cielo.
Esa especial noche estaba despejada y mientras Virn cantaba antiguas melodías, acompañado de curiosos instrumentos, obra de su propio y particular ingenio, el maestro Sagl, discutía con Yhke sobre una nueva estrella que había descubierto, producto de largas y agotadoras observaciones a través de su catalejo, regalo de un antiguo traficante de contrabandos. Sagl estaba muy intrigado y conmovido por este descubrimiento, porque según su conocimiento esta estrella era nueva en el firmamento. Yhke en cambio, era de la opinión de que siendo esta estrella muy hermosa, no olvidara que lo más probable es que ya hubiera existido y brillado antes para otros planetas, lo que no quitaba lo valioso de su descubrimiento, pero que debería observar con calma y buscar en antiguos registros sobre su origen y existencia.
Entre las hermosas constelaciones Virn en cambio, ya había elegido la suya, Add, y guardaba celosamente entre sus innumerables escritos, en un idioma solo legible por él, sus cualidades y la ubicación exacta en el firmamento y le había jurado ante si mismo y el cosmos, su fidelidad eterna. Guardaba celosamente entre dibujos, viejos libros y cálculos este secreto que solo mostraba a sus dos amigos y mientras lo hacía tomó en sus manos el manucristo más valioso, uno de los pilares de su erudicción y en un gesto loable, lo puso en las manos de Yhke, era su manera de sellar una joven pero eterna amistad. Quería con este gesto que su estrella, Add, iluminara también a Yhke entregándole parte de la alegría, que él compartía permanente, alentando su vida.
Mientras Sagl y Virn bebían y cantaban, la mirada de Yhke se alejaba en el pasado recorriendo antiguos caminos, recordando la existencia de una especial estrella en su vida, a la cual él veneró sin descanso, una vez conocida nunca más miró el firmamento, lo cual fue apagando su vida, ya que su existencia pasó a depender solamente del caprichoso brillo de esa estrella. Al darse cuenta de ello Yhke le reprendió su actitud invitándola permanentemente a rectificar su especial forma de ser con él, pero la estrella decidida a imponer su voluntad condenó a Yhke a vivir en oscuridad permanente, acusándolo de desamor con el resto de su constelación. La gran pena que esto causó en Yhke apagó por largo tiempo su afán. Solo logró encontrar felicidad al compartir su castigo con tres hermosas flores que crecieron en su jardín, que con cariño cuidó y protegió, hasta lograr que crecieran fuertes y robustas adornando su vida con los colores hermosos de los pétalos de sus flores.
El nuevo y alegre brindis de Virn, distrajo a Yhke de sus pensamientos. Los tres bebieron con ganas el delicioso brebaje preparado para la ocasión, acompañado de deliciosos bocados hechos en el fogón de Virn.
El regreso de Yhke fue alegre, y mientras intentaba conciliar el sueño, recostado en su camastro miraba a través de las gritas del viejo techo, las estrellas, pensando en el descubrimiento de Sgal, la estrella de Virn y si alguna vez encontraría una para él….
1 Comments:
Yogi,
El otro día te dí mi opinión.....
Te " recuerdo " otras opiniones .....que creo complementan las del otro día
Un abrazo Amigo.....
http://alejandrocuevas.blogspot.com/2005/08/para-atentos-estar-2.html
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