viernes, diciembre 23, 2005

Navidad...


Entre los habituales ajetreos de fin de año, nunca debemos olvidar lo más importante en esta fecha de Navidad, que es el renacimiento de lo mejor de nosotros, en una refundación personal y de entrega de amor hacia nuestros seres queridos, el mundo y nosotros mismos, representado en el nacimiento de Dios hecho hombre.
Alegrémonos de nuestros logros, reconsideremos nuestros fracasos y tengamos fe en el futuro, entregando siempre lo mejor de nuestro corazón expresado en el amor al prójimo.


Un gran abrazo y los mejores deseos en esta Navidad.

viernes, diciembre 16, 2005

Filete v/s Filete...


Filete, versión de Virn...











Filete, versión de Sagl...

martes, diciembre 13, 2005

==> El Silencio <==


Una y otra vez observaban el resplandor de la fuente, los colores que emanaban sin cesar cegaban la visión haciendo casi imposible distinguirlos; se confundían entre ellos conformando resplandores de un blanco tan puro que los colores del entorno perdían su presencia. La habitación pequeña, adquiría una dimensión monumental perdiéndose sus detalles, transformándose en un todo con la fuente y los tres iniciados.
De cuando en cuando, era posible oír el silencio, el cual solo era interrumpido por la respiración apenas sostenida por la emoción vivenciada.
La presencia de Sagl, Yhke y Virn, no era casual, durante días de viaje agotador habían llegado a este nuevo destino. El silencio.
Era en este estado, en el que ahora se encontraban, el óptimo, para afinar su estado vibratorio y corregir todas las grietas energéticas producidas durante sus incontables viajes y experiencias entre la raza humana. Era imposible no contaminarse entre tanta miseria, egoísmo, envidia y odio, que encontraban a cada paso en sus vidas. Había llegado la hora de ordenar sus niveles de conciencia, transparentando su alma y limpiando sus corazones.
La meditación prolongada recorriendo cada una de sus experiencias, más que encadenarlos nuevamente a la tierra, los liberaba. Sentían sus cuerpos nuevamente livianos, sin peso, sin amarras, fuertes y poderosos. Pero ese poder iba mas allá de la fuerza física, necesaria para sostenerlos, era una fuerza emocional, dada por la convicción de sus principios, guiados por una fuerza superior.
En este estado no sentían hambre ni sed, las emociones desaparecían, junto con las necesidades corporales. Sus cuerpos ampliaban su presencia, perdiendo el contorno y su color, y lentamente se iban fundiendo con la energía que emanaba de la fuente, la cual aumentaba en intensidad a cada momento. Sus cinco limitados sentidos ya no tenían asidero, no eran necesarios, en el plano en el que se encontraban eran reemplazados por un sentido superior para poder vibrar en esta nueva experiencia. Eran parte de un diálogo universal de sabiduría intrínseca, en donde no había límites, los cuales solo existen para los humanos, amarrados al plano material al cual vuelven una y otra vez sin poder liberarse. Podían fundirse una y otra vez en este estado de latencia universal, pasando a formar parte de él, en él y por él.
Pero tenían claro, mientras sentían la luz, que aún quedaba mucho por delante. Que por ahora solo tenían el don de vivir por algunos instantes esta experiencia, pero bien valía la pena el trabajo por ello. Y lejos de amilanarlos, los potenciaba en su objetivo de acceder permanentemente a este nuevo nivel en sus vidas.
Las túnicas blancas que los cubrían, sus cabezas rapadas, las sandalias y sus tatuajes corporales, adquirían el estatus de un uniforme de campaña, con el cual saldrían nuevamente al mundo, a repartir sus conocimientos, deleitar con su sabiduría y seducir con su brillo…
Y aún en silencio, sin hablar, pero con todo dicho, avanzaron a su nuevo destino, cumpliendo una vez más con su misión de amor… que era su elección… porque tenían fe que en algún momento lograrían abrir los ojos de otros y esa sería su recompensa…

viernes, diciembre 09, 2005

... La Prueba...


La marea a cada momento estaba más agitada, los vientos del sudeste balanceaban peligrosamente la pequeña embarcación, y los negros nubarrones anunciaban que el tiempo empeoraría. A gritos apenas audibles, Virn, Yhke y Sagl, amarrados a las barandas de cubierta, recogían velas para evitar un peligro mayor. De vez en cuando los nubarrones dejaban caer fuertes aguaceros, que lejos de causar daño, refrescaban los salados rostros de los tres.
La estrellada noche invitaba a disfrutar de una animada conversación, el viaje planeado hacía tiempo y postergado por ocupados e intensos días, al fin era una realidad. El buen vino, la deliciosa brisa del mar, eran sin duda un escenario ideal, para compartir vivencias, cuentos e historias de sus vidas, tan disímiles, pero tan conectadas en el plano cósmico.
La fuerte marejada rápidamente se transformó en tormenta, golpeando el timón que a duras penas era sostenido entre Yhke y Sagl, mientras Virn chequeaba amarras, y recorría la embarcación en busca de posibles fugas o averías. Era el momento de demostrar una férrea unión, con un objetivo en común, salvar sus vidas, hasta que amainara la tormenta. Las olas, verdaderas montañas de agua salada, oscuras y temibles eran, sin duda, un gran y poderoso obstáculo para los tres, pero el temple, conocimientos y confianza adquiridos en su largo y difícil entrenamiento, era la herramienta clave para salir de esta gran prueba. El objetivo inicial de descanso y distensión, había sufrido un cambio dramático, transformándose en una prueba de vida y sobrevivencia.
Los relámpagos iluminaban por instantes sus rostros cansados de la lucha, pero también iluminaban sus fuertes espíritus, acostumbrados a las vicisitudes, adaptados al cambio. Una y otra vez la embarcación sufría fuertes coletazos, que cambiaban su rumbo, tumbándolos peligrosamente a estribor o sumergiendo por instantes la proa, trayendo con fuerza su carga líquida, que luego se deslizaba con fuerza por la cubierta arrastrándolo todo, dejando una huella de absoluta desolación y desesperanza.
Las canciones de Virn, que hablaban de sueños y amor, tomaban un rumbo perdido en el suave oleaje, y eran devueltas con una reverberación magnífica, amplificada por los suaves efectos del aperitivo y la comparsa del universo. El viento, colado a través de mástiles, velas, sogas y cubiertas acompañaban la guitarra, como si fuesen una orquesta de instrumentos de viento; la explosiva risa de Sagl, se unía a los sabrosos trozos de quesos y frutas, mientras Yhke servía el delicioso vino tarareando letras desconocidas, pero tan lógicas en cada canción, nacidas desde el corazón del autor, de origen muy conocido por los tres.
En la carta de navegación Yhke, intentaba infructuosamente reencontrar la ruta trazada, las fuertes marejadas habían alterado el rumbo y el sextante y la brújula habían desaparecido, tragados por el furioso mar. Solo la estrella de Ad, divisable a instantes por Virn, guiaba en este laberinto de agua la embarcación.
¡ Luz a babor!.... el grito de Sagl, despertó la esperanza de Yhke y Virn…
La luz del faro era potente, visible por instantes, era la señal que esperaban encontrar, y se transformó en energía vital. No cabía duda, que a pesar de la gran tormenta que los mantuvo al borde de la desesperanza, esta solo había servido para probarles que su rumbo no estaba perdido, que en la desesperanza está la esperanza, que en la fe, está la fuerza; y que nunca habían perdido el rumbo, su ruta siempre fue la correcta, solo distorsionada por la fuerza de la tormenta. Mientras la potente luz del faro los guió nuevamente a su rumbo, y el cielo se despejaba luciendo su estrellado escenario y la luna acogía con su enigmática presencia…. e iluminaba las suaves curvas de la guitarra de Virn.

... ya viene....



Circunstancias de la ajetreada vida me han tenido muy ocupado y alejado de mi blog.... pero eso cambiará....